Esta es la tercera etapa del rosarino en el Club Blanco. En su primera temporada, entre 2000 y 2005, como futbolista ganó una Liga de Campeones, dos Ligas y dos Supercopas de España. La segunda vez empezó desde abajo, como cualquier entrenador juvenil. Siguió creciendo hasta llegar al filial, donde disfrutó de la oportunidad de dirigir al primer equipo durante cuatro meses tras la destitución de Lopetegui.
Dejó el banquillo a un lado, ansioso por la etapa final en México América. Esperaba una buena oferta que le permitiera seguir creciendo en el fútbol y el Madrid llamó a su puerta por tercera vez. Por supuesto, espera regresar con un impacto en la organización, y el club promete hacer precisamente eso. Y así será.